Un estudio de actualidad realizado por Facundo Manes, neurocientífico de la UNL (Argentina), ha comprobado que una buena alimentación permite desarrollar favorablemente tu cerebro. El neurocientífico afirma una "directa relación entre una correcta alimentación y el buen funcionamiento del cerebro". Este dato supone una gran relevancia, ya que, está comprobado que una persona de clase media que no realiza un desayuno completo, no dispondrá de una buena actividad cerebral. El cerebro, a lo largo que avanzan las horas, irá descendiendo crecientemente su actividad en comparación a una persona que haya realizado un correcto desayuno.
La evidencia entre la nutrición y el desarrollo cognitivo es clara: El desarrollo del cerebro es dinámico hasta los 20-25 años, y este requerirá de una buena alimentación y buen estímulo afectivo y cognitivo.
La buena alimentación nutrirá plenamente a nuestro organismo, aumentando así, el número de neuronas de nuestro cerebro y ampliando, de esta forma la actividad cerebral, cognitiva y afectiva.
Fuente: vitadelia.com
Los efectos de una desnutrición en el cerebro suponen un gran impacto en el lóbulo frontal, encargado de la planificación y la toma de decisiones, un impacto en el lenguaje y la memoria.
Se ha comprobado que, difícilmente, una persona desnutrida puede llegar a recuperar la plena actividad neuronal. Por lo que, algunos gobiernos han incorporado en sus políticas una nutrición integral para garantizar la nutrición y salud cuidadana con el fin de poder aumentar el número de personas recuperadas de una mala nutrición y un desarrollo cerebral deficiente.
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